miércoles, 30 de marzo de 2011

El mundo de lo desconocido invade Atocha

La estación de Atocha en Madrid acogió el pasado mes la VIII edición de la Feria esotérica donde videntes, santeros cubanos y profesionales en medicinas alternativas despleagron su talento con el fin de dar a conocer un mundo aún tan desconocido para algunos.
Entre los días 3 y 13 de marzo tuvo lugar la VIII edición de la feria esotérica y alternativa celebrada en Madrid, donde como cada año se trató todo lo relacionado con las ciencias ocultas con todo el respeto que se merece haciendo de ella un punto de encuentro al que acudieron grandes profesionales e interesados en este mundo tan misterioso.
La Feria se organizó en distintas actividades repartidas en los 11 días que duró y que consistían en conferencias y talleres, donde profesionales especializados llevaban a cabo terapias alternativas y todo tipo de rituales según lo que el cliente necesitaba. Además, todos los días los videntes desplegaban todas sus artes adivinatorias con el fin de predecir el futuro a quien no pudiese esperar en saber lo que le deparaba su destino, además de consultas de astrología, masajes, reiki o medicina tibetana.
No solo son estos grandes devotos de las ciencias ocultas los que se podían encontrar caminando por la feria, sino que de repente se cruzaba un empresario rezagado que reconocía no creer en absoluto en nada que no pueda ver ni tocar, pero sí, ser muy consciente y aprovecharse del gran abanico de oportunidades que se abre frente a sus ojos sacando un negocio adelante que tenga que ver con las artes adivinatorias o ritos de magia blanca, desde tener más suerte con el dinero hasta conquistar algún corazón esquivo o, incluso, mejorar la salud.
La feria ya ha terminado, pero seguro que tras el éxito obtenido, la capital volverá a ser tomada por magos, médiums y brujas para que todos aquellos interesados acudan en busca de respuestas y ¿por qué no? quizá algunos escépticos logren sorprenderse.

viernes, 25 de marzo de 2011

«No soporto que la gente hable de 'trenes de la muerte'. Yo conducía uno, pero no llevé a nadie a la muerte; no fuimos nosotros ni los trenes, fueron los terroristas»

Siete años despues del terrible atentado del 11 de Marzo, ocurrido en Madrid, se sigue recordando a todas las víctimas y fallecidos. Varios testimonios nos acercan más a lo que fue uno de los mayores atentados terroristas en Europa, que acabó con la vida de 192 personas.

Roberto Martín, un maquinista de RENFE que estaba ese día de servicio daba su testimonio de lo ocurrido: «No soporto que la gente hable de 'trenes de la muerte'. Yo conducía uno, pero no llevé a nadie a la muerte; no fuimos nosotros ni los trenes, fueron los terroristas». Él conducía uno de los convoyes atacados, que hacía el trayecto Alcalá de Henares-Chamartín, y en sus vagones 1, 4, 5 y 6 estallaron cuatro bombas a las 7:38, cuando estaba parado junto a la calle Téllez, a 800 metros de la estación de Atocha, dónde murieron 64 personas. «No se olvida, la gente lo lleva dentro, pero hay que ir a trabajar».

Parte del homenaje a las víctimas en la estación de El Pozo


Un guarda de seguridad de la estación nos cuenta que debería haber más seguridad, porque el suceso podría repetirse actualmente, mientras otra empleada de la estación asegura que hay muchos policías secretas, pero que aun así es muy difícil controlar todo y a todos, “sería imposible mirar cada maleta y cada bolsa de todos los que entran en la estación. La gente necesitaría tres horas para ir a trabajar". 

Incluso hay quien asegura que varios empleados pidieron el traslado a otras estaciones para no revivir el suceso día a día.

Económicamente hablando, el atentado también supuso un golpe para la empresa, que no tenía seguro y tuvo que pagar 4 millones de euros.

Debido a las labores de limpieza, el servicio de cercanías estuvo parado durante 4 días, además se podían ver algunos vagones que faltaban por retirar en los que se podían apreciar los alcances del atentado.     

Monumento a las víctimas del 11-M en la estación de el Pozo
Con motivo de este atentado y en recuerdo de sus víctimas y fallecidos se construyeron una serie de monumentos que hasta el día de hoy siguen atrayendo las visitas de familiares y afectados.

Uno de los más representativos es el situado justo delante de la estación de Atocha, un cilindro que contiene en su interior los nombres de las víctimas y mensajes de algunos madrileños. Fue construido el 11 de marzo del 2007 e inaugurado por los Reyes. Aparte de éste se construyeron otros en las estaciones dónde ocurrieron los demás atentados como el de Santa Eugenia, u otros construídos en emblemáticos lugares de Madrid, como El Bosque del Recuerdo en El Retiro.

El último fue inaugurado en la estación de El Pozo este mismo año con motivo del séptimo aniversario. Un monumento al agua a cuya inauguración acudieron Alberto Ruíz-Gallardón y Mariano Rajoy entre otros.
Monumento al agua, en memoria de los fallecidos por el atentado del 11-M

Sin duda este atentado terrorista supuso un antes y un despúes en la historia de España, tanto por su alcance como por los las tramas políticas a las que dio lugar. Sea como sea, lo cierto es que pasen siete años o un siglo, nadie olvidará este trágico acontecimiento que afectó a todo un país que nunca olvidará a sus víctimas.
                                                                                                    

Monumento a las víctimas del 11-M en Atocha


domingo, 13 de marzo de 2011

"No entiendo por qué la gente quiere saber su futuro, así es menos emocionante"

Raquel Serrano, vidente y cartomántica desde hace 19 años, se encuentra estos días en la VIII edición de la feria de esoterismo en Madrid (http://www.mundo-magico.org/). Trabaja en la televisión, en canal 28, y tiene una  particular visión acerca de la profesión. Esto, unido a la cercanía que transmite hacia sus clientes la convierten en una vidente de lo más peculiar.

Con ella comentamos todo lo relacionado con el mundo de la videncia y su larga trayectoria profesional, llena de experiencias y anécdotas. Este mundo está muy relacionado con el lucro y la estafa, de ahí que muchas personas que se hacen llamar videntes, se aprovechen de ello. Al respecto, Raquel Serrano comenta: “Yo si creo en la videncia, pero no es algo que se puede practicar siempre, no se puede practicar todos los días, no es algo que lleves dentro de ti. Yo soy cartomántica, las cartas son más precisas, haces una lectura y una interpretación de las cartas, pero la videncia es otra cosa, viene cuando quiere y se va cuando quiere”.


Muchos se preguntan qué es lo que lleva a una persona a dedicar su vida a la videncia. “Lo mío fue todo casual, no había encontrado mi sitio en el mundo laboral, hasta que a los 30 años empecé y me gustó. Llevo 19 años en esto, es mi modo de vida y lógicamente con los años vas adquiriendo conocimiento”. ¿Se podría hablar de un don especial? “Yo no lo llamaría don, simplemente con la práctica y la experiencia he aprendido a desarrollar mucho la mente y tengo esa capacidad de ver un poquito más allá que los demás. Pero yo no le llamaría videncia, no me considero vidente ni clarividente. Simplemente consigo ver a través de las personas, más de lo que otras ven. Acabas siendo una pequeña psicóloga del alma”. Y cuando te dedicas finalmente a esto, ¿qué opina la familia de uno al respecto? Parece que no es el futuro que los padres desean para un hijo. “Tu familia no lo ve bien, no entiende que te dediques a esto: pero si has estudiado, puedes hacer otras cosas, me dicen”.

La videncia a veces va reñida con la religión, escepticismo para muchos, incredulidad para otros, y es que hay personas para las que es mucho más gratificante acudir a un vidente antes que a un confesionario o viceversa, ¿es esto compatible? ¿Qué religión practican la mayoría de los videntes? “Yo soy cristiana y católica, pero este trabajo no está reñido con ninguna religión, su base fundamental es el amor, se trata de cuidar y mimar a la gente y siempre tener una actitud positiva. Una cosa es la espiritualidad y otra la religión”. Una persona que se dedica a esto está constantemente oyendo problemas de la gente y trata de ayudarles en lo que puede, ¿esto afecta de alguna manera? “Es muy sacrificado, ves sufrir a gente, te implicas e intentas ayudarles pero no siempre lo consigues. Yo recomiendo a mis clientes que vivan el día a día al máximo y que tengan una actitud positiva”.

Conocido es el lucro que rodea a esta profesión y todo lo relacionado con la televisión y las estafas de las compañías telefónicas. ”Si, hay mucha estafa, pero no todos somos así claro. Hay gente que se aprovecha de las personas que buscan respuestas y que están mal o perdidas en la vida”. ¿Se puede hacer por teléfono o por la televisión el mismo trabajo que teniendo a la persona delante? “Hombre, siempre es mejor tener cerca a la gente, notar sus vibraciones, mirarla…pero en la televisión es igual, solo que tienes menos tiempo y oyes a la persona por teléfono en vez de en persona”.



A veces es difícil creer que una persona puede vivir a base de esto, que pueda convertirlo en su forma de vida y en su única vía de ingresos, ¿es posible? “Mira, yo al principio pedía la voluntad, pero la gente no tiene mucho dinero y te dan poco o nada, a veces. Pero una come y tiene que vivir y tenemos familia, hijos o lo que sea, así que cuando me hice autónoma no me quedó más remedio que poner unas tarifas. Pero no está reñido, puedes ayudar a la gente y cobrar por tu trabajo”.

Anécdotas o historias curiosas habrá muchas, ¿Qué es lo más raro que llegan a pedir o preguntar los clientes? “Tenemos una señora mayor con alzheimer la pobre, que nos llama todos los días para preguntarnos dónde tiene las llaves o dónde ha puesto no se qué cosa. Tuvimos que llamar a su familia para informarles de esto y estaban enterados y de acuerdo. También ha habido casos de personas que nos llaman para buscar a sus perros o gatos, se les han perdido y quieren que les digamos donde están”.

Peticiones como estas habrá de sobra, pero lo que la mayoría de la gente busca es conocer el futuro, quieren respuestas antes de tiempo, para estar preparados, por incertidumbre o porque están pasando un mal momento: “No entiendo por qué la gente quiere saber su futuro, ¿para qué? Así es menos emocionante, y te lo digo yo, que trabajo en esto”.

Pues por unas razones u otras lo cierto es que a la gente le interesa el tema, la feria está a tres días de terminarse y está abarrotada, llena de personas que ya sea para conocer su futuro, para aprender a leer las cartas o por simple curiosidad, se han acercado hoy hasta aquí.