lunes, 27 de junio de 2011

LA INVIDENCIA DE LOS VIDENTES

Por todos/as es conocida la picaresca de algunas personas y algunos sectores a la hora de buscarse la vida o buscar un negocio rentable y lucrativo. Por supuesto el mundo de la videncia y las artes adivinatorias no se salvan y es que, el interés social que despierta todo lo mágico, lo que no conocemos y la posibilidad de poder conocerlo, está haciendo que cada vez sean más los videntes y adivinos que ofrecen sus servicios, multiplicando con ello el número de denuncias por estafa y fraude.

Anuncios en televisión, en periódicos, en Internet, en blogs…están por todas partes anunciando sus servicios. A veces las estafas también vienen de la mano de las compañías telefónicas. El tarot telefónico está en auge, es muy fácil montar tu propio negocio y poder estafar de manera legal. Montas una empresa, contratas un número de teléfono de tarificación especial, publicas anuncios en periódicos, Internet, televisión...y a esperar las llamadas de los incautos. Así de fácil. Los teléfonos de contacto suelen ser 902 y 806 por lo que las llamadas no son precisamente baratas.




José Antonio Gómez trabajó durante dos años de comercial para una empresa de telecomunicaciones, en la que se incluía el servicio del tarot telefónico. Vivió desde dentro como, lejos de que verdaderos profesionales o expertos en el tema te atendieran, el propósito era que cuanta más gente llamara y más tiempo estuviera al teléfono, mejor.

“Tenían a 8 chicas durante las 24 horas del día. Tenían una voz bonita, sugerente, que convencía. No eran videntes, más bien intuían, deducían y en los peores casos no acertaban”. Cuantos más minutos tuvieran al teléfono a la gente más cobraban ellas “porque cobraban por minutos”.

Claro que si no había muchas llamadas se recurría a los empleados de la empresa. “Cuando no había muchas llamadas nos decían a nosotros que llamáramos, para que pareciera que había gente llamando constantemente. A cualquier empleado, uno de administración o del departamento de personal, al que estuviera más libre le decían “oye llama que no entran casi llamadas de fuera”.

Si a todo esto le sumamos que muchos de ellos, a pesar de que en España es legal este tipo de negocio, lo hacen de manera ilícita sin declarar a Hacienda, estamos ante una doble estafa.


Estafas habituales

Según un artículo (http://manuelcarballal.blogspot.com/2007/03/las-estafas-esotricas.html)  publicado por Manuel Carballal (vicepresidente 2º de CIAC) en la revista Policía, hay timos más típicos y que más han llevado a videntes ante un tribunal de justicia. Algunas de estas estafas son el "timo del trabajito", los "videntes nómadas" y la "limpia del dinero".


El “timo del trabajillo” consiste en "diagnosticar" al cliente un mal de ojo como origen de todos sus problemas y males. Para solucionar esto, el supuesto vidente realizará trabajos de limpieza y purificación, además de remedios como amuletos, hierbas o plantas, que el cliente tendrá que pagar. El proceso puede durar lo que el vidente quiera, argumentando que el hechizo o mal de ojo es demasiado fuerte; o lo que el cliente esté dispuesto a aguantar (o pagar).
 

Otro de los timos esotéricos es el de "la limpia del dinero", que se puso de moda en los años 90. Básicamente consiste en robarle literalmente el dinero a los clientes. Se acude al vidente normalmente por problemas económicos y éste pronostica que el dinero está maldito. Así que es necesario limpiarlo y purificarlo. Para ello el cliente debe llevar su dinero a la consulta. El vidente lo introduce en una bolsa de plástico opaca y lo sumerge en un "líquido mágico" para quitarle la energía negativa. Al rato, con una excusa se ausenta y le dice al cliente que vigile la bolsa. Logicamente el vidente no vuelve y se ha llevado con él el dinero.

Otro tipo de estafa, cada vez más numerosa, es la de los "videntes nómadas". Aquí, el supuesto vidente alquila una habitación de hotel o una pensión donde establece su consulta.
Como garantía y seguridad de sus poderes cobrará solo la mitad por adelantado y la otra mitad cuando haya finalizado su trabajo y se hayan verificado sus poderes.
Cuando los clientes acuden a reclamar o vuelven a su consulta, el falso vidente se ha ido a otra ciudad, con las mitades de decenas de personas que confiaron en él.



Casos reales
El caso de Elena Hernández tiene “guasa”. Se estuvo haciendo pis en la cama hasta los 12 ó 13 años y su madre decidió llevarla a una curandera para ver si podía solucionar el problema. Un día escuchando la radio, una tal “Manuela”, una especie de santera-curandera, decía poder solucionar todos estos problemas, así que allá que fueron. Algunos de los remedios de esta mujer eran de lo más eficaces, claro que no hace falta ser curandera para que te funcionen; “teníamos que hacer unos rezos, me daba estampitas y unas hierbas para que me tomara;  estaba totalmente prohibido que bebiera nada después de las 7 de la tarde. Claro cuando no bebía nada, eso iba fenomenal y no me hacía pis, pero en el momento en que bebía se volvía a torcer la cosa”.


Baraja de cartas de tarot

Durante dos meses, todos los sábados estuvieron acudiendo a su “consulta” en su casa y se llegaron a gastar casi 200.000 pesetas entre sesiones y todas las hierbas y estampitas que ella misma les proporcionaba y por supuesto les cobraba. Todo para nada, al final se dejó de hacer pis claro, pero no gracias a esta señora. “Al final resultó ser un sacacuartos, esta señora se aprovechaba de todo “lo malo” que tenía la gente para sacarle dinero”.

Otro caso de personas que se han sentido engañadas o simplemente su visita a un vidente no les ha servido para nada, es el de Almudena Cernuda. Ella acudió a la consulta de un vidente por motivos amorosos principalmente. Siente que más que predecir su futuro o hacer adivinaciones, la vidente más bien le sonsacaba información y soltaba fallidas predicciones que más tarde ella misma comprobaría.
“Tenía buenas referencias de ella por un compañero de trabajo que me dijo que era buena, así que un día fui a verla. Siempre tiene uno la esperanza de que se vayan a arreglar las cosas e intentas buscar soluciones donde no las hay, pero te das cuenta de que al final te dicen lo que quieres oír.  Pregunté por mi matrimonio que no estaba en sus mejores momentos, me dijo que era una mala racha y que todo se arreglaría; al año y medio me separé. Me dijo que tendría una enfermedad y no tuve ninguna; también cambios laborales y nada, de hecho llevo en la misma empresa 20 años; me avisó de la muerte de un familiar cercano y no falleció nadie, cosa de la que me alegro claro. Mi sensación cuando salí de allí fue un poco decepcionante. Me siento engañada. No dio una con respecto a mi futuro”.

Por estas predicciones Almudena pagó 10.000 pesetas, hace unos 15 años. Obviamente no es una millonada, pero sea lo que sea, a nadie le gusta que le engañen, se lucren a su costa o que le den falsas esperanzas que nunca llegarán.


El ejemplo de los famosos
El ejemplo de algunos videntes famosos, conocidos por sus apariciones en televisión, no es de lo más alentador que se diga. Apariciones frikis, escándalos y espectáculo es todo lo que muchos de ellos han sabido o podido aportar al mundo de la televisión.

Aramis Fuster
Octavio Aceves
Rapel
Cristina Blanco

Y qué decir de los escándalos televisivos, tanto personales como profesionales, de Aramis Fuster (http://www.youtube.com/watch?v=s3ZhRdkrOBc) o las dudosas predicciones de Octavio Aceves   (http://www.youtube.com/watch?v=WmLwI03Ed-M&feature=related).



 





Como evitar las estafas

Según la experiencia y el estudio de todas las denuncias recibidas por la policía durante los últimos 20 años, se han formulado una serie de medidas que pueden ayudar a que otras personas no sean estafadas o por lo menos que se lo piensen dos veces a la hora de acudir a un vidente para resolver sus problemas o dudas:

  1. Desconfíar siempre del vidente que pase consulta en un hotel o habitación alquilada.
  2. Desconfíar de aquellos videntes que por iniciativa propia se ponen en contacto con los clientes para advertirle de terribles desgracias que ellos pueden evitarles, a cambio de dinero claro.
  3. Jamás se debe someter dinero en efectivo o joyas en rituales de "purificación mágica", "trabajillos" o "limpias de dinero".
  4. Siempre que sea posible hay que acudir acompañado de un amigo o familiar a la consulta. Así habrá un testigo presencial en caso de estafa.
  5. En caso de entregar una gran suma de dinero a cambio de un trabajo de magia, exija un recibo o factura. Si no le pueden expedir un recibo, no pague en efectivo, hágalo con un cheque nominativo a nombre del vidente. Esto podría ser utilizado como prueba.
  6. Y sobre todo, no tema denunciar una estafa. Ningún falso brujo que recurra al fraude tiene poderes mágicos reales para hacerle daño. De tener poderes no necesitarían recurrir al fraude.
       


Está claro que todo esto no va desaparecer de la noche a la mañana, sobre todo porque nunca dejará de haber gente que se aproveche de los demás, ni tampoco personas que por creencia, ignorancia o desesperación, recurran a este tipo de personas para que les ayuden. Pero es un avance que todo esto se conozca y se tomen medidas contra este tipo de gente. Además así se podrá ayudar a que muchas personas no sigan siendo engañadas y estafadas tanto económica como emocionalmente.

Fuentes:
  • Google

Irene Garciapatos Gómez

1 comentario:

  1. Buenos días,

    Soy Elena Martín, periodista de Cuatro. Os escribo porque estamos haciendo un reportaje sobre las estafas de los videntes que prometen amor y suerte y nos gustaría encontrar a una persona que haya sido timada por este tipo de videntes para que nos cuente su historia y podamos denunciarla públicamente.

    Dejo mi correo para que os pongáis en contacto conmigo: elenamartinmorenobaeza@gmail.com

    Muchas gracias.

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